Celia Fernández | 28 Agosto 2023
¡Hola mis zanadores! Hoy venimos con otra recetita de cosmética, pero para el pelo. Para que podamos nutrir y reparar esos pelos castigados por el verano y los factores ambientales. Esta mascarilla hidratante nos va a aportar un montón de nutrientes además de suavidad y brillo. Como siempre con ingredientes naturales. Vamos a ver cómo la vamos a preparar y os iré explicando las propiedades de sus ingredientes.
Primero vamos a empezar a diferenciar un suavizante de una mascarilla. Básicamente las mascarillas son más nutritivas y densas, y quizás no la vamos a usar siempre. Aunque si os digo que para las que tengáis el pelo seco y sobre todo rizado pues no nos va a venir mal usarlo como suavizante, y usándo poca cantidad. El suavizante o acondicionador suele ser más ligero y si se suele usar a diario, y además actúa rápido por lo que se puede enjuagar en seguida.
Primero vamos a elaborar una infusión concentrada de cola de caballo. Luego os dejo la receta con las cantidades para elaborar aproximadamente 500 ml de mascarilla.
Al contener tallos vamos a cocer la planta unos minutitos cuando llege a ebullición. Luego la dejamos macerar unos 10 minutos y lo filtramos. Lo reservamos para después. La cola de caballo aporta silicio y otros nutrientes. Disminuye la caída del pelo y promueve el crecimiento. Lo fortalece y le da brillo.
En otro recipiente vamos a pesar los siguientes ingredientes:
Nos aporta magnesio, es nutritiva, hidratante pero también reduce la grasa.
Es otra manteca super nutritiva también, repara el pelo dañado y le aporta mayor suavidad e hidratación.
Voy a usar un oleomacerado o extracto oleoso de zanahoria que hice yo misma en casa. Si te interesa aprender a hacer tus oleomacerados u oleatos en casa, te dejo este post aquí.
Este aceite tiene vitaminas, promueve el crecimiento y repara el pelo dañado y apagado.
Uno de los mejores aceites para el pelo. Lo nutre, hidrata y fortalece. Además es antioxidante.
Nuestro emulsionante principal es el Olivem 1000. Nos ayudará a unir aceites y mantecas con la infusión.
Y también vamos a utilizar el alcohol cetílico. Un co-emulsionante natural derivado normalmente del aceite de coco o de palma. Le da mayor consistencia al producto y estabilidad a la emulsión. Es un alcohol graso
Una vez pesado todos estos ingredientes de origen lípidico en un recipiente, lo llevamos al baño maría hasta que se funda todo.
Luego tenemos que medir la temperatura de ambas fases, la fase de aceites y mantecas, y la fase acuosa de la infusión. Cuando estén a igual temperatura, vertemos la infusión sobre los aceites mientras batimos enérgicamente. Yo calenté un poca la infusión para que estuvieran a igual temperatura. Luego lo batimos con la batidora un rato hasta que este homogéneo y se enfríe la mezcla. Dejando una textura cremosa y densa.
Una vez que la mezcle esté a temperatura ambiente, añadimos los principios activos, antioxidantes y conservantes.
Nos aporta antioxidantes y proteínas, por lo que hidrata y fortalece.
Este extracto es un aliado para el pelo y la piel en cualquier elaboración cosmética. Si quieres aprender a elaborar tu propio extracto hidroglicerinado de avena, te dejo el post aquí.
Es una proteína hidrolizada proveniente de la seda que nos dará un extra de hidratación y brillo.
Para evitar la oxidación de todas las mantecas y aceites, además de aportarnos propiedades antioxidantes en el pelo. Es importante cuando añadimos tantos aceites y mantecas.
Podéis elegir el que queráis realmente, pero yo usé el de limón que es astringente y controla el cabello graso. ¡Y huele muy bien! El limón suele llevar componentes fotosensibles, pero como es un producto que nos vamos a enjuagar, no hay problema.
Una vez agregado todo estos ingredientes, mezclamos de nuevo.
Solo nos queda medir el pH y asegurarnos que esté entre 3,5-4. Aunque podéis aumentarlo más perfectamente, yo lo dejé en 3,8 aproximadamente para que nos produzca menos frizz o encrespamiento. Una vez que esté en ese rango de pH. añadimos el conservante natural que actúe en ese rango de pH.
Y ya podemos envasar y disfrutar de nuestra mascarilla. La usamos después del champú y la dejamos actuar unos minutos y la enjuagamos. Si queremos mayor hidratación la dejamos media hora. Os dejo aquí la receta con las cantidades y espero que os encante esta mascarila para mimar vuestro pelo.