Celia Fernández | 23 Octubre 2023
¡Muy buenas! Estamos de nuevo un lunes más hablando sobre cosmética natural en Zanatumente.
Hoy tenemos una receta de pasta de dientes natural sin flúor. Sus propiedades son: antiinflamatoria y antiséptica. Reduce el mal aliento previniendo enfermedades. Además es blanqueadora sin ser tan abrasiva como las pasta dentales blanqueadoras con químicos.
Vamos a empezar hablando de la importancia de no consumir flúor. Aunque siempre nos han dicho que es bueno para fortalecer el esmalte, la realidad es que el flúor se acumula. Esta acumulación a largo plazo afecta al sistema nervioso y a otros tejidos del organismo. También a las funciones cerebrales pudiendo interferir con un desarrollo normal. Y aumenta la absorción de aluminio, que está relacionado con el desarrollo del Alzheimer. También solemos encontrar Flúor en el agua corriente o en el agua embotellada. Por ello es importante evitar los productos que sabemos que llevan flúor, además de otros tantos componentes químicos peligrosos que pueden llevar las pastas de dientes comerciales.
Por eso vamos a aprender a elaborar esta pasta de dientes natural hoy. Aunque ya hablamos de como elaborar una pasta de dientes Ayurveda con plantas, si te interesa te lo dejo por aquí.
El tomillo tiene un gran poder antiséptico y antiinflamatorio. Ayuda a desinflamar encías irritadas, nos viene bien en infecciones, también combate el mal aliento y es analgésico reduciendo las molestias y heridas. Si no tenemo tomillo podemos usar otras plantas como la salvia, el hinojo, la lavanda, … Y también podemos usar hidrolatos o aguas florales.
Además de sus propiedades emolientes en la boca, va a ayudarnos a mantener la humedad en nuestra pasta dental.
Es una goma natural que nos dará esa textura gel en la pasta de dientes. Con esta textura es más fácil para aplicarla en el cepillo de dientes y para usarla.
Si no quieres usar alcohol puedes quitarlo de la receta y añadir conservante hidrosoluble natural. Pero en esta receta he querido obviar el conservante, y sustituirlo por el alcohol y la glicerina. Ya que juntos van a asegurarnos la conservación. Además estamos haciendo poca cantidad, en caso de que hicieramos mucho quizás si sería mejor usar un conservante.
A mi parecer el mejor aceite para la salud bucodental. De hecho si no haces pasta de dientes natural, una alternativa sería usar el aceite de coco tal cual como enjuage diario. El aceite de coco nos ayuda a desinfectar por sus propiedades antibacterianas y a eliminar el sarro. También desinflama las encías y mejora el aliento. Creo que combinado con el tomillo se suman todos estos beneficios.
Este tensioactivo natural derivado del coco es el agente limpiador y que nos va a permitir que genere espuma.
También conocida como caolín. Además de limpiar es antiséptica, contiene gran cantidad de minerales y refresca el aliento. Tiene un bajo nivel de abrasión.
Existe bastante controversia con el bicarbonato en el uso de la higiene bucodental. Pero realmente no entiendo el porqué cuando tiene un nivel de abrasión de 7 en la escala RDA que cataloga la abrasión de las sustancias. De 0 a 70 se considera abrasión baja, de hecho hay muchas pastas de dientes en el mercado con ingredientes químicos que tienen un nivel de abrasión muchísimo mayor que el bicarbonato. Pero claro si usas bicarbonato no compras pastas dentales con flúor, que es lo que le interesa a la industria. En cuanto a las propiedades del bicarbonato, previene caries y gingivitis. Reduce la acidez de la boca y mejora el mal aliento, además blanquea los dientes.
Otro ingrediente que nos va a ayudar a blanquear los dientes. Realmente este ingrediente es opcional si crees que con el bicarbonato tienes suficiente. También desinfecta y reduce las caries y otras enfermedades de las encías. Y aunque el carbón activado puede ser un poco más abrasivo que el bicarbonato, sigue siendo menos abrasivo que las pastas dentales blanqueantes con químicos.
Nos proporcionará aroma y propiedades. Yo elegí el de menta que mejora el aliento y es antibacteriano. El de árbol del té que es antiséptico y regenera. Y el de naranjas para darle un toque más dulce además de que también es antibacteriano.
Es opcional pero para mejorar el sabor de la pasta no es mala idea. Yo usé uno de stevia con vainilla, en el que me indica que cada 5 gotas equivale a una cucharada de azúcar, así nos guiaremos. Aunque el sabor es cuestión de gustos.
Pesamos la glicerina y la goma, y lo disolvemos muy bien para que vaya espesando. A esta mezcla le agregamos el alcohol y la infusión previamente preparada y filtrada. Las infusiones para la cosmética las solemos hacer un poco más cargadas que cuando las usamos internamente.
Y reservamos la Fase 1.
Pesamos el aceite de coco con la betaína y lo mezclamos muy bien. En esta fase también podemos agregar los aceites esenciales, ya que no calentamos ninguna de las fases. Pero también se los podemos agregar al final, es cuestión de gustos.
Pesamos la arcilla blanca, el bicarbonato de sodio y el carbón activado vegetal. Es decir, todos los ingrediente secos. En este punto os recuerdo que al trabajar con polvos siempre es recomendable usar mascarilla para no inhalar nada. Y mezclamos los polvos muy bien.
Ya tenemos las 3 fases. Mezclaremos la Fase 1 y 2 con la batidora e iremos añadiendo poco a poco la Fase 3. Cuando todo esté homogéneo, tenemos que asegurarnos que esta alrededor de un pH de 7. Y que no se nos olvide nuestro endulzante, que huele y sabe genial.
Por aquí te dejo la receta con los ingredientes, y espero que disfrutes de esta pasta de dientes. ¡Nos vemos en el próximos post!