
Celia Fernández | 10 Febrero 2025
El hisopo, conocido científicamente como Hyssopus officinalis, pertenece a la familia de las Lamiaceae. Esta planta aromática, originaria del sur de Europa, Asia y el norte de África, ha sido valorada desde la antigüedad por sus propiedades medicinales y su uso en rituales de purificación. Una característica llamativa del hisopo es su capacidad para atraer abejas y otros polinizadores, lo que lo convierte en una planta beneficiosa para el ecosistema. Según la leyenda, el hisopo era utilizado en ceremonias religiosas para limpiar y purificar templos y hogares.
El hisopo contiene varios componentes bioquímicos que le confieren sus propiedades medicinales. Entre los más destacados se encuentran los aceites esenciales, como el pineno, el alcanfor, la hyssopina o el limoneno, entre otros, que tienen propiedades antimicrobianas y antiinflamatorias. También presenta terpenos como la marubiina, con propiedades expectorantes. Además, contiene flavonoides y taninos que contribuyen a sus efectos antioxidantes y astringentes.
Además, entre el aceite esencial tiene unos componentes como la pinocanfona y la isopinocanfona, que pueden ser neurotóxicos. Por este motivo no se debe usar el aceite esencial del hisopo de forma interna.
Antimicrobiano: Combate infecciones bacterianas y virales.
Antiinflamatorio: Reduce la inflamación y alivia el dolor.
Antioxidante: Protege las células del daño oxidativo.
Expectorante: Ayuda a aliviar la congestión y facilita la expulsión de mucosidad.
Digestivo: Mejora la digestión y alivia los trastornos gastrointestinales.
El hisopo es una planta perenne, sus flores de dos labios, que varían del azul al púrpura, son la parte más utilizada y se pueden encontrar en diversos formatos como infusiones, aceites esenciales y tinturas. Estas flores se recogen cuando aún no han abierto del todo para que no se volatilicen los componentes más sensibles.
En la antigüedad se ha usado como un remedio para curar muchas afecciones.
Se puede preparar una infusión con las flores secas de hisopo para tratar problemas respiratorios y digestivos. Se recomienda tomar una taza al día. Es útil en casos de mucosidad, además es tónico y calmante. Pero se recomienda tomarlo en el punto más alto de la infección para no tomarlo tanto tiempo y que no irrite las mucosas.
También es un buen calmante y sedante en caso de asma.
Gracias a su aceite volátil también puede ayudar en casos de indigestión, cólicos o hinchazón.
La tintura de hisopo se puede diluir en agua y consumir para aliviar la tos y la congestión.
El aceite esencial de hisopo se puede aplicar diluido en la piel para tratar heridas y picaduras de insectos. También se puede utilizar en aromaterapia para aliviar el estrés y la ansiedad, aunque nunca usarlo internamente y si lo usamos para aromaterapia debe ser en muy baja dosis.
Las compresas de infusión de hisopo se pueden aplicar sobre la piel para reducir la inflamación y acelerar la cicatrización.
El hisopo también se ha usado para darle sabor a bebidas y licores, ya que es muy aromático y tiene un sabor ligeramente amargo. Ha sido típico en licores franceses como el Chartreuse elaborado por unos monjes con una mezcla de 130 hierbas y flores.
Existen otras plantas que comparten algunas propiedades con el hisopo o que pueden ser confundidas con él:
–Lavanda (Lavandula angustifolia): Tiene propiedades calmantes y antimicrobianas similares.
–Salvia (Salvia officinalis): Conocida por sus propiedades antiinflamatorias y digestivas.
–Romero (Rosmarinus officinalis): Aunque se parece físicamente al hisopo, no tiene las mismas propiedades medicinales y puede ser tóxico en grandes cantidades.
El uso del hisopo debe ser supervisado, ya que puede interactuar con ciertos medicamentos.
No se recomienda su uso en mujeres embarazadas o en periodo de lactancia, ni en niños pequeños.
Además, es importante evitar el uso interno del aceite esencial de hisopo e incluso evitar usarlo excesivamente de forma externa o en aromaterapia, ya que puede ser tóxico en altas dosis, como hemos visto por el componente pinocanfona. De hecho, se dejó de usar en perfumes ya que puede tener efectos cancerígenos.