
Celia Fernández | 2 Mayo 2023
Si sigues nuestro contenido, sabrás que la semana pasada elaboramos un emulsionante casero de igual forma que elaboramos un jabón saponificado. Este emulsionante se llama Esterarato de sodio o Sodium estearate. Si quieres aprender a hacer tu propio emulsionante te dejo el post para que no te lo pierdas, antes de elaborar esta crema. Además en él hablamos sobre la dosificación y usos de este emulsionante.
Esta crema me ha sorprendido bastante su textura y densidad, a pesar de ser una crema fluida he notado una textura parecida a un mousse. Os confieso que me ha gustado mucho como se extiende en la piel dejándo una sensación muy suave durante mucho tiempo. En concreto hemos elaborado una crema de aceite en agua o O/W, y dentro de esta clasificación hemos elaborado la más fluida.
Y con los ingredientes que le hemos añadido podemos decir que es una crema hidratante, antiinflamatoria y que alivia irritaciones, con capacidad regeneradora y antioxidante.
Pero vamos a ver ya los ingredientes que necesitamos, aunque como siempre te digo puedes personalizar la fórmula o sustituir ingredientes.
Escogí el agua destilada por no quitarle protagonismo al emulsionante que es la joya de la corona de esta receta. Pero tu si quieres puedes sustituir el agua por un hidrolato o infusión para sumar propiedades, siempre que respetes la proporción de fase acuosa.
En la base acuosa que elijamos vamos a disolver la glicerina vegetal. Proporciona hidratación y suavidad a la piel.
Este emulsionante casero ayudará a estabilizar la crema y permitir que los ingredientes se mezclen adecuadamente. Lo bueno de este emulsionante es que podemos hacerlo de forma casera y fácil y tener bastante cantidad para un montón de tiempo. Y ahorrando dinero, por supuesto.
En esta receta voy a disolverlo en el agua caliente. Y lo vamos a agregar en un 3%, junto con un 2% de alcohol cetílico como co-emulsionante. En total tendríamos un 5% de emulsionantes en esta fórmula.
Rico en ácidos grasos y antioxidantes, nutre la piel y le da vida. Es un buen aceite portador de otros nutrientes. También tiene propiedades antiinflamatorias. Es un aceite indicado para todo tipo de pieles, incluso las más sensibles.
Hidratante y protectora. También es antiinflamatoria, disminuyendo irritaciones y picores.
Otro emulsionante que junto con el estearato de sodio ayudará a crear una emulsión estable y una textura suave.
Calma y suaviza la piel. Las pieles sensibles adoran este extracto. También es hidratante, antiinflamatorio y antiséptico. Con efecto rejuvenecedor en la piel. Si quieres aprender a elaborar tu propio extracto de avena natural en casa, te dejo este post aquí.
Ayuda a fortalecer la piel, previniendo el envejecimiento, nutriendo, hidratante y regenerando. Además aporta en la piel propiedades suavizantes y acondicionadoras.
Antioxidante que protege contra el envejecimiento prematuro y además evita que se enrancie el aceite y la manteca que hemos añadido a la crema.
Tiene propiedades regeneradoras, cicatrizantes y calmantes. También es antibacteriano, anéstesico y antiinflamatorio.
Para prolongar la vida útil de la crema. Sin conservante podremos usarla unos día y si la almacenamos en la nevera una semana o semana y media aproximadamente. Pero gracias al conservante hidrosoluble, que siempre aconsejo que tenga certificación de que se puede usar en cosmética natural, nos puede durar de 3 a 4 meses. Yo usé leucidal como de costumbre.
Pero también además de el conservante el uso de esta también influirá en que dura más o menos la crema. Si evitamos meter el dedo sucio por ejemplo, su conservación se prolongará.
Pesa el agua destilada, la glicerina y el estearato de sodio en un recipiente limpio y desinfectado. Las cantidades las encontrarás al final del post en la imagen de la receta.
En otro recipiente limpio pondremos la fase oleosa. El aceite, la manteca y el alcohol cetílico.
Con ambas fases listas, las llevamos a calentar al baño maría donde se disolverán todos los ingredientes. Luego podemos retirarlas del fuego y verter la fase acuosa sobre la oleosa mientras batimos con una batidora intensamente. Una vez que se dé la emulsión, podemos poner el recipiente en agua fría para acelerar el enfriamiento, antes de añadir los demás ingredientes.
Cuando la emulsión esté fría vamos a agregar el extracto de avena, la proteína de arroz, la vitamina E y el aceite esencial. Mezcla todo muy bien.
Ya sólo nos queda medir el pH. Probablemente debido al estearato de sodio tendrá un pH más elevado(7-8). Para bajarlo yo usé ácido láctico, aunque también puedes usar ácido cítrico. Una vez que esté en un pH adecuado para la piel entre 5- 5,5, podemos añadir el conservante hidrosoluble. Atendiendo también a que el conservante actúe en ese rango de pH. Mezcla bien y ya puedes envasar tu crema, 100% hecha por ti.
Aquí te dejo todas las cantidades de los ingredientes, qué por cierto es para elaborar aproximadamente 30 ml de crema. ¡Listo! Ahora tienes una crema fluida parecida a un mousse hecha en casa con ingredientes naturales y con tu propio emulsionante casero. Recuerda almacenarla en un lugar fresco y oscuro. ¡Disfruta de los beneficios para tu piel!